Para llenar el vacío.
¿Cómo no apilar tus libros
y tirar tu ropa
en todos los rincones
de la inmensa casa?
¿Cómo no colgar un cuadro
o grafitear la pared
para que te diga algo?
¿y por qué?
Las paredes no hablan.
Si lo harían
quizá
dirían
que es normal.
Porque el vacío disgusta de todas formas.