es a través de las palabras.
Por que la verdad
no es fácil justificar lo injustificable.
Hay que ser muy ingenioso.
Por ejemplo
frente al problema con mis adicciones
prefiero no decir nada
entonces no existen.
o puedo decir también
que son tan placenteramente cotidianas
que dejaron de ser un problema
para ser una realidad.
o puedo ir a ver a un especialista.
pagar una consulta
y ver que pasa.
Pero así
ya no es divertido
ni libre
y puede causar
dependencia también.
Y eso sería un garrón.
Todo lo demás
es natural
ni bien - ni mal
es natural.
y escribo tres signos de exclamación
para lo que no
!!!
sociedad de drogadictos
los que dicen lo que piensan
los que hacen lo que sienten.
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| Fotos: Richard Kern - Laura Smoke |
