La marea esta alta y agitada
parecen que los dioses hoy
están furiosos
desde allá
el horizonte
sacuden las aguas.
Es el grito desgarrador
la impotencia y la potencia
del poder de la naturaleza.
que deja
en las piedras húmedas
el perfume dulzón
de estas aguas.
hace que mi cabello
cuando voy
quiera desgarrarse
y cuando vuelvo
abrazarme
Desde esta hamaca al río
me dispongo a saltar
envolverme en la adrenalina
y caer confiada
al suelo
tierra firme.
Seguridad.

